¿Sabes qué es el tagline de una marca? Quizás uno de los más antiguos de ellos sea «Cogito ergo sum», es decir, «Pienso, luego existo», de René Descartes. Esta oración que aprendemos de adolescentes es una filosofía de vida para algunos, y si hablamos de frases que indican un modo de vivir no podemos olvidar, «Carpe Diem» del poeta Horacio.
¿Qué es el tagline de una marca y cómo se utiliza?
A colación de esto, hoy vamos con una breve lección de branding, una parte pequeña que carga de significado y diferenciación a una marca. El Tagline es el lema de una marca, una frase que resume la identidad, la personalidad y el rasgo diferencial o competitivo de la misma. Este debe explicar dónde está y dónde quiere llegar.
La marca verbal o nombre de la empresa no tiene porqué identificar la actividad, personalidad o modo de hacer de una empresa, es más, no debe hacerlo. Esa identificación se logra con el tagline, es más, en ocasiones funcionan solos y pueden llegar a identificar la marca sin necesidad de que aparezca un logotipo. ¿En qué piensas si te digo «Porque yo lo valgo»? Tanto creció este lema de L’Oréal que a día de hoy tiene versiones, como «Porque tú lo vales», «Porque nosotras lo valemos».
El tagline forma parte del sistema de marca junto a la marca gráfica, el color, las formas o elementos gráficos… Suele acompañar a la marca gráfica, aunque puede funcionar solo, y es invariable salvo que haya un cambio estratégico en la empresa.
Es importante tener claro qué es el tagline y que no debemos de confundirlo con el eslogan o claim en inglés. Este último es una frase comercial que ilustra una campaña en concreto, una vez termine esa campaña el eslogan deja de usarse. Hay ocasiones que el eslogan pasa a ser tagline debido al éxito de una campaña y la acogida que tiene por parte del público. A pesar de ello, esto no es lo habitual y pasa muy de vez en cuando, pero el rumbo de la marca lo trazan las personas.
Tipos y ejemplos de tagline
Un tagline debe de ser corto, emocional y resumir la esencia de la marca. A ser posible, no debe de estar formado por más de tres palabras, debe apelar a los sentimientos, lograr llegar a las personas y tocar el corazón o las emociones, y no tiene que ser súper original, gracioso o creativo porque como hemos dicho resume la esencia de la marca. A ser posible debe ser pegadizo e inspirador.
Clasificación y ejemplos según su finalidad
Ahora que sabemos qué es el tagline y cómo debe de ser, podemos diferenciar diferentes tipos. Según la finalidad que busquemos, podemos clasificarlos en:
- Explicativo: «Love your skin» de Olay. Explica la categoría de negocio.
- Superlativo: «Impossible is nothing» de Adidas. La empresa se presenta como la mejor de su categoría.
- Imperativo: «Just do it» de Nike. Es una orden que invita a actuar, normalmente comienza con un verbo.
- Provocativo: «Can you hear me now?» de Verizon. Suele ser una pregunta que incita a pensar.
- Descriptivo: «Porque tú lo vales» de L’Oreal. Describe la promesa de marca, el producto o servicio que ofrece la empresa.
Volviendo al principio, creemos que hay pocas frases u oraciones que describan mejor la identidad de alguien como la de Descartes y la de Horacio. A la hora de elaborar el tagline o lema de tu marca, ten estas dos en mente. Perduran en el tiempo, todos las recordamos y logra apelar a nuestras emociones. Estas dos icónicas frases nos ayudan a comprender perfectamente qué es el tagline, su significado y nos invitan a actuar.
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