Vivimos en una sociedad en la que la competencia es la norma. Existen y cada día aparecen decenas de nuevas marcas. Productos y servicios de todo tipo, que compiten en el entorno real y virtual por la atención de los consumidores. Y justamente de eso se trata el posicionamiento de marca. De lograr conquistar un lugar propio, con autoridad e inmodificable, en la mente de nuestros clientes.
¿Cuáles son las consecuencias de un mal posicionamiento de marca?
Si tienes una empresa, un emprendimiento o una idea de negocio, seguro que habrás escuchado muchas veces sobre los beneficios de posicionar tu marca. La realidad es que cuando lo logras, no solo llegas a un público mayor. Principalmente conquistas y fidelizas a tus clientes, que comprenden tu valor diferencial.
Y es que de eso se trata el posicionamiento de marca. De comunicar de forma efectiva la esencia, los valores, la personalidad de tu propuesta. Pero, ¿Qué ocurre cuando fallamos en este proceso? ¿Cuándo posicionamos mal nuestra marca?
Pues sin duda que es una tremenda amenaza al crecimiento del negocio. Posicionar mal tu marca hará que no llegue a tu público objetivo, que no se descubra, que no se conozca ni se valore. Y a largo plazo, que fracase o se estanque. Si buscas la mejor asesoría para impulsar tu marca, logrando un buen posicionamiento, visita nuestra web.
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Descubre los errores más comunes en el posicionamiento de marca
Cuando hablamos de posicionar una marca en el mercado, son varios los aspectos sobre los cuales debemos trabajar. No basta tan solo con conocer tu producto y sus funciones. Es importante pensar estratégicamente, para comunicarte con tus potenciales clientes de forma eficaz. Veamos los errores más comunes que se cometen en este proceso.
El posicionamiento confuso o no posicionamiento
Si eres de los que piensan que tu producto es para todos, pues es de uso muy amplio, habrás caído en el primer error de posicionamiento. Ten muy presente que las campañas abstractas o demasiado genéricas, simplemente no funcionan.
El consumidor está más entrenado. Sabe lo que quiere y cómo lo quiere. Por ello, mientras más lo conozcas y comprendas su forma de pensar, mejor te irá. Al hacer el posicionamiento de tu marca, plantéate un objetivo, un buyer persona y un plan de acciones para acercarte a él.
Valores de la marca no definidos
Otro de los errores más comunes en el posicionamiento de marca, es no definir cuáles son los valores de tu marca. A veces pensamos que con el producto y su calidad es suficiente. Pero no es así. Imagina que tienes una tienda de pijamas. Pensarás que no necesitas de demasiados valores para vender pijamas.
Pero hay decenas, cientos de marcas con una oferta similar a la tuya. Entonces, ¿Por qué tu consumidor debe elegirte? Puede que tu marca sea juvenil, o clásica y elegante, ecológica, o con un concepto específico. Piensa en los valores de tu marca, pues es desde ese lugar que tu cliente se fidelizará.
No conocer las necesidades y deseos del consumidor
Si no conoces lo que el consumidor quiere, tendrás una ruta directa para fracasar en tu proyecto. No importa qué tan bueno crees que sea tu producto. Si no responde a lo que tu cliente potencial quiere, necesita, sueña, desea o aspira, ten por seguro que las posibilidades de crecimiento serán pocas.
Confundir la marca con el producto
Y el último de los errores de posicionamiento de marca, es también de los más comunes. Volvamos al ejemplo de las pijamas. Ellas son tu producto, pero no tu marca. La marca va más allá. Arropa y abarca a los productos. Pero también a la esencia de lo que haces, por qué lo haces, qué valores te mueven y cómo te quieres comunicar con las personas que te compran.
En definitiva, el posicionamiento de marca está lleno de detalles. De acciones estratégicas generales, pero también de otras que deben sostenerse en el día a día. Tus redes sociales, tu imagen gráfica, tu servicio de atención al cliente, tu presencia en la web. Todo ello construye el posicionamiento que hará que tu marca escale.