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El marketing digital te puede ayudar a llegar a tu público objetivo en un mercado local. Aunque te permite, además, abrirte a clientes más lejanos. Sigue estas pautas.

 

  1. ¿Qué quieres?

Lo de no tener claro el objetivo que se persigue es habitual, pero es un error de base. Si no sabes cuál es tu destino es probable que no llegues nunca. ¿Quieres atraer público al comercio? ¿Potenciar tu reputación de marca? ¿Fidelizar a clientes que ya tienes? ¿Vender a clientes nuevos? Sí, sabemos que lo quieres todo, pero cuando intentas conseguir todo a la vez es posible que no consigas nada. Márcate un objetivo inicial y crea estrategias para conseguirlo.

 

  1. Improvisa pero no mucho.

Un poco de improvisación es necesaria para poder adaptarse a la actualidad, pero no solo de improvisar vive el hombre. Es recomendable establecer un calendario con aquellos contenidos y acciones de valor, más pensados, que servirán para atraer a tus clientes en periodos de tiempo más largos

 

  1. No procrastines.

Las estrategias de marketing online requieren de un tiempo para configurarse y empezar a funcionar y más tiempo aún para que den sus frutos en cuanto al posicionamiento de tu web. Intenta centrarte en crear un plan de comunicación – dentro del que está tu plan de redes sociales- orientado al objetivo que has elegido y ponlo en marcha cuanto antes.

 

  1. Piensa en local

Una tienda online te abre al mundo, no solo a tu ciudad. Pero si ofreces servicios locales, te resultará más efectivo tratar de llevar a cabo estrategias que te permitan posicionarte como referente en tu ciudad. Un ejemplo: Si eres una farmacia en A Coruña, ¿por qué quieres posicionar tu web en términos tan generales como “farmacia” o “farmacia España” que te pueden traer tráfico de gente que está en Murcia o Gran Canaria. Pero si tu estrategia está en posicionarte como referente en A Coruña con palabras clave como “farmacia de guardia en A Coruña”, es probable que te traiga algunos clientes porque quien busca esas palabras es probable que se convierta en cliente. ¿Recibirás menos visitas? Sí, pero más clientes potenciales.

 

  1. Dale valor a tu producto

Escoge tácticas que realcen las cualidades, calidad y valor del producto – servicio y evita aquellas que parecen restarle valor. Un aviso: lo gratis no funciona. Deja de ofrecer pruebas gratuitas porque solo devalúan el valor del producto de cara al cliente y apuesta por descuentos en compras de varias unidades – es un descuento, pero no se percibe como tal- o por el regalo de producto a cambio de algo como su email suscrito a tu newsletter – no es un regalo sino un intercambio-.

 

  1. Marca tus reglas

Seguro que has oído lo de “lo importante es que hable de ti aunque sea mal”. Esto repercutirá en las ventas de una forma directa así que no podemos decir que sea del todo cierta. Lo que sí es cierto es que, si hablan mal de ti, puede ser una oportunidad: por un lado, para mejorar el aspecto que sugiere el cliente; y por otro, para mejorar tu reputación de marca, ofreciendo una solución pública a esta queja.

 

  1. Segmenta pero con precaución.

Si la muestra a la que nos dirigimos es muy grande (España), debemos segmentar. Pero si la muestra ya está acotada, por ejemplo, de forma geolocalizada, quizá segmentar más podría solo limitarte. Geolocalizar y segmentar por A Coruña puede ser suficiente. Puedes añadir otras sectorizaciones como acotar por rangos (como por edades o nivel adquisitivo) pero intenta que tu público no sea muy pequeño. Si te centras solo en gente que le gusta la moda porque tienes una tienda de ropa, estarás perdiendo posibles clientes a los que les gusta la gastronomía pero que también quieren vestirse bien.

 

  1. Mide y analiza

Medir, medir y volver a medir. Esta es una de las claves. Hay muchas herramientas para medir qué es lo que está pasando y poder tomar decisiones según si la respuesta no está siendo la deseada. Cada red social tiene un botón de analítica y también puedes registrar qué está pasando en tu web gracias a Google Analytics. No dejes que pase una semana sin saber cómo te están funcionando tus tácticas dentro de tu estrategia global; puede que no resulten como esperes y debas cambiarlas.

 

  1. Los milagros no existen

Si no has conseguido los resultados esperados, analiza dónde está el problema, hay muchos factores externos a la promoción que influyen en su éxito o fracaso. Producto, precio, servicio, realidad versus expectativa generada…. Analiza las métricas obtenidas y sigue probando estrategias nuevas.

 

EN RESUMEN

El futuro de los negocios locales también está en Internet. Casi todos los usuarios buscan lo que necesitan en la Red y pueden llegar a ti encontrándote. Eso sí: escoge un objetivo, una estrategia, las tácticas dentro de esta, un público al que dirigirte y después mide y analiza qué se pude mejorar. ¿Ya lo has hecho? Repite el proceso periódicamente. O escríbenos y lo hacemos por ti.